Alberto Alzberto

ES UNA TRAMPA PARA TURISTAS. HUYE, NO HAGAS COMO NOSOTROS. Tendría que haber sospechado cuando entré al baño a lavarme las manos, porque tela de baño lo asqueroso que está, de vergüenza. Es mucho pedir una taza de váter entera y jabón?? El menú carísimo, de 22.50€, que te hace esperar un mínimo de calidad, pero qué va. Unos entrantes a compartir muy muy flojitos (patatas bravas con una salsa de cabrales mala pero mala de verdad, cómo será que no nos gustó a ninguno de los 7 que éramos, una ensaladilla rusa aceptable y unos fingers de pollo con salsa agridulce bastante meh), y el plato principal eran o costillas que no estaban muy allá o secreto ibérico que estaba duro y encima otra vez con la salsa de cabrales que tuvimos que decir que por favor no queríamos más de esa salsa. Me parece increíble que en un menú de insisto 22.50€ de postre había la friolera de dos opciones, o una tarta de yema que bueno o una manzana (eso sí, con su cuchillito medio limpio para pelarla). Ojo que no tenían ni platos de postre. En fin, un asco caro, que si al menos fuera barato... Saben que eres un turista que no va a volver y se aprovechan, intentas buscar algo mejor que la cafetería del oceanografic y catapum