انجمن راهنمایان محلی
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Lugar histórico cerca del aeropuerto de Bilbao. Podría ser 5/5 si los precios estuvieran ajustados a la calidad que ofrecen.
Impresionante lugar, no todos los días comes en un sitio cuyas paredes existían antes del Descubrimiento de America.
Sito en un espectacular caserío del S.XV, es un lugar ideal para esa comida especial (y para comidas diarias también, claro) como era nuestro caso, a celebrar algo. Y salimos encantados.
Nada mas llegar y atravesar un frondoso vergel, te recibirá una amigable bandada de pavos reales, muy salados. Aunque pintan sabrosos, no, no se comen. Si acaso reserva algo de rico pan para darles después, te lo agradecerán.
Una vez sentados, decidimos tomar el menú degustacion baserri tradicional: Antxoas del cantabrico, tortilla de bacalao, croquetas dos sabores y txuleton (con tx, como debe ser).
Todo estaba espectacular, a la altura.
Comentar un punto peculiar, y es que si eliges un menú, todo el mundo esta obligado a comer ese menú. Es un caso de o comemos todos o el pavo al rio (he retocado ligeramente el refrán popular, para hacerlo mas amigable, si).
En nuestro caso esto no nos supuso ningún problema, comimos de lujo como auténticos navegantes añejos y salimos dispuestos a redescubrir la ruta de la seda por mar. Pero antes saludamos a los pavos, que nos exigían su cuota pan.
Muy recomendable.
Sito en un espectacular caserío del S.XV, es un lugar ideal para esa comida especial (y para comidas diarias también, claro) como era nuestro caso, a celebrar algo. Y salimos encantados.
Nada mas llegar y atravesar un frondoso vergel, te recibirá una amigable bandada de pavos reales, muy salados. Aunque pintan sabrosos, no, no se comen. Si acaso reserva algo de rico pan para darles después, te lo agradecerán.
Una vez sentados, decidimos tomar el menú degustacion baserri tradicional: Antxoas del cantabrico, tortilla de bacalao, croquetas dos sabores y txuleton (con tx, como debe ser).
Todo estaba espectacular, a la altura.
Comentar un punto peculiar, y es que si eliges un menú, todo el mundo esta obligado a comer ese menú. Es un caso de o comemos todos o el pavo al rio (he retocado ligeramente el refrán popular, para hacerlo mas amigable, si).
En nuestro caso esto no nos supuso ningún problema, comimos de lujo como auténticos navegantes añejos y salimos dispuestos a redescubrir la ruta de la seda por mar. Pero antes saludamos a los pavos, que nos exigían su cuota pan.
Muy recomendable.
Este sitio lo he conocido gracias a un programa de televisión y me parece fascinante el lugar ya que los entornos rurales me gustan mucho. Al llegar tuve la suerte de conocer a su dueño y de hablar un poquito de ese programa y porque nosotros estábamos allí comiendo.
La comida aunque siendo cara no defrauda, es espectacular por ejemplo el sabor del cordero.ñ, las carrilleras de Angus, el entrecot al punto, los.postres ricos y caseros, el servicio super amable y elegante, en todo momento muy amables y te hacían sentirte como en casa. Me ha encantado ese lugar y volveremos seguro. Gracias por todo.
La comida aunque siendo cara no defrauda, es espectacular por ejemplo el sabor del cordero.ñ, las carrilleras de Angus, el entrecot al punto, los.postres ricos y caseros, el servicio super amable y elegante, en todo momento muy amables y te hacían sentirte como en casa. Me ha encantado ese lugar y volveremos seguro. Gracias por todo.
Extraordinario sitio de lo bonito que es, en un entorno fantástico, además rodeados de pavos reales.
Muy bueno el servicio de las camareras y la comida en general, aunque entiendo que es un poco alto de precio y tampoco ponen demasiada cantidad en la raciones .
Muy bueno el servicio de las camareras y la comida en general, aunque entiendo que es un poco alto de precio y tampoco ponen demasiada cantidad en la raciones .
Un sitio super bonito, se nota desde que se entra. El restaurante por dentro muy comodo y con espacio entre mesas.
Las camareras atentas y majas.
La comida muy rica, pedimos almejas sopa y rape. A destacar la salsa verde de las almejas y el pescado para dos estaba buenisimo.
Al acabar de comer estuvimos en el jardin y estuvimos muy agusto
Las camareras atentas y majas.
La comida muy rica, pedimos almejas sopa y rape. A destacar la salsa verde de las almejas y el pescado para dos estaba buenisimo.
Al acabar de comer estuvimos en el jardin y estuvimos muy agusto
Hoy domingo, y después de tiempos queriendo ir hemos vivido una experiencia en el aspaldiko muy agradable, con muy pocas sombras y bastantes luces, y muy acogedoras.
Empezando desde el parking desde el cual ya se puede ver la preciosa fachada principal, y accediendo por un camino ya se ven los jardines y el acceso principal, todo aquí te recuerda a épocas pasadas, hacen que te metas en el ambiente desde el principio.
El servicio de camareras ( solo he visto a mujeres, no sé cuál será la razón) muy atentas te acomodan enseguida, si tienes suerte y te llevan al piso de arriba puedes fijarte por el camino en toda la estancia que es digna de fotografiar; En nuestro caso elegimos el menú Baserri, y fue un acierto, es un a buena manera de probar diferentes platos.
El menú empieza con tres entrantes, los tres bastante bien, el foie correcto, la crema de guisantes y las mollejas muy buenos platos pero eché en falta un poco mas de temperatura, al igual que en resto del menú.
Les siguen un bacalao perfecto de punto con guarniciones originales, y una carrillera de ternera también perfect de punto con una demiglace bastante buena pero en este caso con las diferentes guarniciones el conjunto del plato queda demasiado dulce, eché en falta algo que contraste ese dulzor que te va muy bien pero en medida.
Para terminar el postre era muy cremoso echo con mascarpone y frambuesas, muy bueno.
En general la experiencia ha sido muy buena y seguramente en algún momento importante volveremos.
Gracias a todo el equipo y hasta otra.
Empezando desde el parking desde el cual ya se puede ver la preciosa fachada principal, y accediendo por un camino ya se ven los jardines y el acceso principal, todo aquí te recuerda a épocas pasadas, hacen que te metas en el ambiente desde el principio.
El servicio de camareras ( solo he visto a mujeres, no sé cuál será la razón) muy atentas te acomodan enseguida, si tienes suerte y te llevan al piso de arriba puedes fijarte por el camino en toda la estancia que es digna de fotografiar; En nuestro caso elegimos el menú Baserri, y fue un acierto, es un a buena manera de probar diferentes platos.
El menú empieza con tres entrantes, los tres bastante bien, el foie correcto, la crema de guisantes y las mollejas muy buenos platos pero eché en falta un poco mas de temperatura, al igual que en resto del menú.
Les siguen un bacalao perfecto de punto con guarniciones originales, y una carrillera de ternera también perfect de punto con una demiglace bastante buena pero en este caso con las diferentes guarniciones el conjunto del plato queda demasiado dulce, eché en falta algo que contraste ese dulzor que te va muy bien pero en medida.
Para terminar el postre era muy cremoso echo con mascarpone y frambuesas, muy bueno.
En general la experiencia ha sido muy buena y seguramente en algún momento importante volveremos.
Gracias a todo el equipo y hasta otra.
Comida muy buena, todo casero y servicio de 10. Tiene zonas exteriores para poder disfrutar cuando hay buen tiempo, y con pavos reales!! Para repetir!